¿Vale la pena tener una tarjeta de crédito de viaje?
Jenny Colon
Publicado el 14 de julio de 2025
Las tarjetas de crédito han evolucionado más allá de simplemente ofrecer una línea de crédito para compras diarias. Hoy en día, existen productos financieros especializados que ofrecen beneficios diseñados para ciertos estilos de vida. Uno de los más populares es la tarjeta de crédito para viajes. Estas tarjetas prometen recompensas atractivas como millas, puntos, acceso a salas VIP en aeropuertos y seguros de viaje. Sin embargo, la gran pregunta es: ¿realmente valen la pena las tarjetas de crédito de viaje?
En este artículo analizaremos los beneficios, costos, condiciones y perfiles de usuarios que pueden sacarle el mayor provecho a estas tarjetas. También te mostraremos qué debes evaluar antes de solicitar una, especialmente si vives en Estados Unidos y hablas español, ya que muchos emisores tienen ofertas dirigidas al mercado hispano.
¿Qué es una tarjeta de crédito de viaje?
Una tarjeta de crédito de viaje es un tipo de tarjeta diseñada para ofrecer recompensas y beneficios relacionados con los viajes. Estas recompensas usualmente se otorgan en forma de millas o puntos que pueden canjearse por boletos de avión, noches de hotel, alquiler de autos, upgrades o incluso experiencias de lujo.
Algunas tarjetas de viaje están asociadas con aerolíneas específicas, como American Airlines, Delta o United, mientras que otras son más flexibles y permiten usar los puntos en múltiples plataformas o transferirlos a varios programas de fidelidad.
Ventajas comunes de las tarjetas de crédito de viaje
Acumulación de millas o puntos: Cada compra que haces con tu tarjeta genera recompensas, especialmente si es una compra en categorías relacionadas con viajes, como aerolíneas, hoteles, renta de autos o restaurantes.
Bonos de bienvenida atractivos: Muchas tarjetas ofrecen bonos de bienvenida después de gastar una cierta cantidad dentro de los primeros meses. Estos bonos pueden ser suficientes para cubrir un vuelo redondo nacional o incluso internacional.
Acceso a salas VIP en aeropuertos: Algunas tarjetas premium incluyen membresías que permiten el ingreso a salas lounge donde puedes disfrutar de comida, bebidas y Wi-Fi mientras esperas tu vuelo.
Seguro de viaje incluido: Muchas tarjetas de viaje ofrecen coberturas como seguro de cancelación de viaje, seguro de pérdida de equipaje, seguro médico internacional, y seguro de alquiler de autos.
Exención de tarifas por transacciones internacionales: Ideal para quienes viajan al extranjero con frecuencia, estas tarjetas evitan el típico cargo del 2% al 3% por compras internacionales.
Beneficios de aerolínea: Prioridad de abordaje, maletas documentadas gratis, selección anticipada de asiento o upgrades automáticos, dependiendo del nivel de la tarjeta.
Desventajas a considerar antes de solicitar una tarjeta de crédito para viajar
Cuotas anuales elevadas: Muchas tarjetas de viaje, especialmente las que ofrecen mayores beneficios, tienen tarifas anuales que pueden superar los $95 e incluso llegar a los $695 o más. Si no viajas con frecuencia, puede que no valga la pena el gasto.
Tasa de interés alta: Aunque se promocionan por sus recompensas, estas tarjetas pueden tener tasas APR altas si mantienes un saldo mes a mes. No son ideales para quienes no pagan el total de su balance cada mes.
Condiciones para aprovechar los beneficios: Algunos beneficios, como el acceso a lounges o el seguro de viaje, requieren que hayas comprado los boletos con esa tarjeta específica.
Complicaciones con la redención de puntos: Algunos programas tienen fechas bloqueadas o requieren más millas para ciertos destinos. Otros limitan los asientos disponibles para canjear puntos.
Posibles cargos adicionales por conversión de divisa: Aunque algunas tarjetas eliminan esta tarifa, otras aún la mantienen, lo cual es importante revisar antes de usarlas fuera del país.
¿Quién debería considerar tener una tarjeta de crédito de viaje?
No todas las personas necesitan este tipo de tarjeta. Su valor depende en gran medida del estilo de vida y de los hábitos financieros del usuario. Aquí te dejamos algunos perfiles para los cuales sí pueden ser una buena inversión:
Personas que viajan al menos dos veces al año por placer o trabajo.
Usuarios que suelen gastar mucho en categorías relacionadas con viajes y entretenimiento.
Personas que pagan el saldo total de su tarjeta cada mes para evitar intereses.
Quienes valoran beneficios como el acceso a lounges, protección de viaje y seguros incluidos.
Usuarios organizados que pueden aprovechar los bonos de bienvenida sin endeudarse.
¿Y si no viajo mucho?
Si viajas una vez cada dos años o solamente haces viajes cortos dentro de EE. UU., posiblemente no obtendrás suficientes recompensas como para justificar la cuota anual de muchas tarjetas de viaje. En ese caso, una tarjeta de crédito sin cuota anual que devuelva un porcentaje en efectivo por tus compras podría ser una mejor opción.
Además, existen tarjetas de recompensas que ofrecen puntos canjeables por efectivo o descuentos en compras cotidianas como supermercados, gasolineras o tiendas por departamento. Estas opciones pueden tener más sentido si tu estilo de vida no gira en torno a viajar.
¿Qué factores debo evaluar antes de solicitar una tarjeta de crédito para viajar?
Tu frecuencia de viaje: Si viajas internacionalmente o incluso varias veces al año dentro de EE. UU., probablemente puedas sacarle provecho.
Tu presupuesto mensual: Revisa cuánto sueles gastar mensualmente y si podrías alcanzar los requisitos para los bonos de bienvenida sin afectar tus finanzas.
Tu capacidad para pagar el saldo completo cada mes: Dejar saldo y pagar intereses eliminaría el valor de las recompensas.
Tu crédito actual: Las tarjetas de viaje generalmente requieren un buen puntaje de crédito (700 o más). Si aún estás construyendo crédito, puede ser mejor optar por una tarjeta básica sin cuota anual.
Los beneficios concretos que usas: Si nunca usas salas VIP o no documentas equipaje, esos beneficios no te aportarán valor, aunque suenen atractivos.
¿Qué pasa con las tarjetas de viaje aseguradas?
Para quienes están en proceso de mejorar o construir su historial crediticio, también existen versiones aseguradas o tarjetas para viajeros frecuentes con menor calificación crediticia. Estas tarjetas pueden ofrecer recompensas modestas, pero ayudan a establecer crédito con el tiempo. Sin embargo, los beneficios como salas VIP o seguros de viaje suelen estar ausentes en estos productos.
¿Y si soy parte de la comunidad hispana en EE. UU.?
Muchos emisores de tarjetas están empezando a ofrecer servicios en español y adaptar sus programas de recompensas para los latinos en Estados Unidos. Si formas parte de esta comunidad, puedes buscar tarjetas que brinden atención al cliente en español, estados de cuenta bilingües y plataformas digitales fáciles de entender. Esto es importante para tomar decisiones financieras informadas sin barreras de idioma.
Además, algunas compañías están empezando a asociarse con aerolíneas que operan vuelos frecuentes hacia América Latina y el Caribe, como Avianca, Copa Airlines, Volaris o Aeroméxico. Si visitas con frecuencia tu país de origen, estas alianzas pueden ser muy beneficiosas.
Conclusión: ¿Valen la pena las tarjetas de crédito de viaje?
La respuesta depende enteramente de tu perfil. Si eres una persona que viaja con regularidad, paga sus tarjetas puntualmente, y puede aprovechar los beneficios que ofrecen, entonces una tarjeta de crédito para viajes puede ofrecerte un excelente retorno. Incluso con una cuota anual, el valor de los puntos, beneficios y seguros incluidos puede compensar con creces el costo.
Sin embargo, si no viajas a menudo, si sueles dejar saldo en tu tarjeta o si prefieres recompensas más sencillas como devolución en efectivo, entonces probablemente una tarjeta de viaje no sea la opción adecuada.
Antes de tomar una decisión, haz una comparación honesta entre tus hábitos de consumo, tu historial crediticio y los beneficios que realmente usarías. Solo así podrás saber si una tarjeta de viaje es una herramienta financiera que se adapta a tu vida o simplemente una distracción costosa.
Aviso legal: Esta información se proporciona únicamente con fines educativos e informativos. No constituye asesoría financiera, legal ni fiscal. Las decisiones sobre productos financieros deben tomarse con base en tu situación personal y, si es necesario, consultando con un asesor financiero certificado. Las características y beneficios de las tarjetas de crédito pueden cambiar con el tiempo y varían según el emisor.